La verdad es que trabajar en el mundo del software es bastante duro psicológicamente. Las situaciones que salen en un vídeo que compartíamos en redes sociales son bastante comunes en todo tipo de consultoras informáticas, grandes, pequeñas, que trabajen para grandes empresas, para PYMEs, para la administración pública… siempre ocurren situaciones como las que vamos a tratar en este post.
- Riesgos provenientes de los propios desarrolladores: El propio equipo de personas que trabajan en el proyecto puede tener problemas de comunicación por la relaciones entre ellos y sus condiciones laborales, lo cual afecta al proyecto más de lo que se piensa. También pueden tener problemas con la filosofía de la empresa. En algunas, la rotación es tan alta que cuesta que una persona empiece y termine un proyecto; cuando la rotación es baja puede ser por dos motivos: el bienestar de los trabajadores (que no daría ningún problema) o por la comodidad de los mismos, lo cual causa también problemas. Unos trabajadores cómodos que no se esfuerzan por mejorar o aprender son un riesgo también para el proyecto. Finalmente, no por la forma de ser o de pensar de los trabajadores o de la empresa, también se dan riesgos causados por la elección de las personas para un determinado proyecto que no les motiva, que les ha tocado porque otra persona de mayor rango lo ha rechazado, poner a personas a cargo de un proyecto cuya esencia desconocen o cuya tecnología o propósito no comprenden nunca lleva a buen fin.
- Riesgos que surgen por la naturaleza del proyecto: A veces el destino enfrenta a los desarrolladores con proyectos innovadores, pero no innovadores de los que molan, nos referimos a proyectos tan innovadores que no saben por dónde empezar; esto unido a un jefe de proyecto que tampoco tiene las ideas claras causa el caos. En otras ocasiones los proyectos se plantean mal, de tal forma que son demasiado grandes… Si no se hace una buena subdivisión y gestión por módulos es muy complicado que los desarrolladores sean eficaces ya que, muchas veces, hay partes del proyecto que dependen de otra… Trabajar de forma ineficiente hace que los desarrolladores también sufran y se creen piques entre ellos, llevando a riesgos del primer tipo.
- Riesgos derivados del cliente: La mayoría de los desarrolladores ven al cliente como su mayor enemigo ya que es el que les va a poner más problemas, lejos de pensar así, en las buenas empresas o consultoras enseñan a los trabajadores que no tratan directamente con los clientes a cuidarlos, mimarlos y hacerles entender su trabajo. Aliarse con ellos es la mejor forma de evitar riesgos. Sin embargo, a veces el cliente trabaja con otros proveedores que le hacen cambiar de idea, dentro de la propia empresa cliente también nos encontramos con sus riesgos provenientes de los trabajadores y de la naturaleza del proyecto, lo cual repercute hacia los desarrolladores como nuevos problemas, etc. Gran parte de los riesgos que se derivan del cliente surgen por lo que hemos comentado antes, porque los clientes no entienden del todo el trabajo de los desarrolladores; o bien hay demasiados intermediarios, o bien la comunicación no es buena entre las dos partes.
Por si esto fuera poco, en muchas empresas también deben enfrentarse a la evaluación de objetivos. Hemos rescatado esta genial tira de Sinergia sin control que explica perfectamente lo que pasa en las evaluaciones:
Por todo esto y porque encima son gente muy maja les mandamos nuestro más sincero abrazo desde Social 4U.