Sabemos que cuando tomas la decisión de insertar un código en tu sitio web corporativo para poder llevar a cabo un posterior análisis exhaustivo de los datos recabados, el ansia por obtener resultados inmediatos puede cegar el verdadero propósito que lleva aparejado la realización del proceso de analítica web, que no es otro que extraer conclusiones globales en base al tipo de audiencia que visita el sitio, su procedencia, comportamiento y las conversiones materializadas, para poder actuar en consecuencia de la forma más efectiva posible.
Objetivos online
Precisamente con el fin de que la información relativa a las conversiones sea realmente útil, resulta de vital importancia tener claro cuál es el objetivo del negocio en lo que respecta a su sitio web. Si lo logras acotar, podrás establecer unos objetivos correlativos de analítica web con los que maximizar el rendimiento proporcionado por la herramienta de medición que utilices. Veamos los más destacados:
- Ventas de productos o servicios: es el objetivo que se marca toda web dedicada al comercio electrónico. Amazon es el referente en este grupo, aunque aquí quedaría englobada cualquier tienda online, por pequeña que sea.
- Captación de datos de contacto del usuario: en este grupo encuadraríamos a las webs que se centran en la generación de leads o clientes potenciales, para lo que necesitan conseguir información como el número de teléfono o la dirección de correo electrónico con la misión de poder contactar con ellos y tratar de convertirlos en clientes reales. Un claro ejemplo serían las landing pages de compañías de seguros a las que llega tráfico cualificado desde sus anuncios de texto o banners.
- Generación de engagement y repetición frecuente de visita: si tu sitio web está centrado en la creación de contenido, su éxito o fracaso dependerá, en buena medida, de la cantidad de usuarios que lo visiten con recurrencia y de su grado de interacción con el mismo. Los periódicos online son el principal referente de empresa enfocada a este objetivo.
- Atención al cliente: una gran cantidad de sitios web incluyen al menos una página destinada a ofrecer información relevante para resolver las dudas que puedan tener los clientes en un momento dado. Las secciones de ayuda y preguntas frecuentes son el exponente más consolidado.
- Generar reconocimiento de marca: las entidades más asentadas se pueden permitir el lujo de utilizar su sitio web corporativo o parte de él para la creación de contenidos relacionados con actividades adyacentes realizadas por la marca que no tienen que ver con el eje de su modelo de negocio. El motivo de ello es incrementar o, como mínimo, mantener el prestigio y la lealtad que han ido ganando con el paso de los años entre su comunidad de seguidores. En este apartado podemos incluir a multinacionales de la talla de Coca-Cola, Nike o Red Bull.
Por supuesto, hay una gran cantidad de empresas que disponen de varias páginas web destinadas a distintos objetivos. Sin embargo, independientemente de que tu sitio web se enfoque a uno concreto o a más, tu labor fundamental consiste en identificarlo/s adecuadamente. Si esta fase llega a buen puerto, será mucho más sencilla la interpretación de los resultados obtenidos a través del proceso de analítica web, puesto que serás plenamente consciente de los KPIs o indicadores clave de rendimiento a los que debes prestar más atención.